Fallar es de humanos, y eso fue lo que hizo el bueno de Bunbury con Radical Sonora, disco que dió el pistoletazo de salida a la fructífera carrera del músico zaragozano, y que sin embargo comenzó con un tropiezo, no porque las composiciones de aquel disco fueran mediocres, sino que se le habían dado un tratamiento y un enfoque algo equivocado.
Sin embargo, y después de numerosas críticas recibidas por el polémico debut, Bunbury se tiró al vacía y lo arriesgó todo a una sola carta, y que vendría en forma de segundo disco, con formato minimalista, y que correspondía al título de Pequeño.
Con éste álbum, Enrique dio rienda suelta a todas esas ideas que rondaban su cabeza, por arriesgadas que parecieran, y las plasmó en un puñado de canciones que coqueteaban con los sonidos mediterráneos, así como con elementos propios de la música mexicana e incluso pequeñas dosis de sonoridades orientales.
Sorprende escuchar la inicial Algo en Común, sobre todo por lo que Bunbury había compuesto antes, pero ahí está el juego, el desmarcarse de todo lo realizado con anterioridad. Sorprende que por momentos suene tan delicado y tan poco barroco, con lo enrevesado que se suele mostrar el artista a la hora de componer, ya que gusta de utilizar numerosos instrumentos en sus composiciones, como se puede comprobar en otras canciones de éste mismo álbum.
Reposada, brillante, cautivadora...así se muestra la primera canción de Pequeño.
Dentro del sonido más folclórico del disco, nos encontramos con títulos como la indispensable Infinito, que el propio Bunbury se ha encargado de grabarla en varias versiones, una de ellas muy ranchera, y que se puede escuchar en uno de sus maxi - singles, que por aquel entonces vieran la luz.
El Extranjero, se convierte desde entonces en uno de los temas preferidos del propio Enrique, y que no duda en reivindicarla cuando es necesario. Lejos de la Tristeza se muestra en todo su esplendor, con unas letras maravillosas y con una entonación suave y bastante menos exagerada de lo que el artista nos suele ofrecer. Excelente la parte central de la canción, con una sección de viento excelente, que se encuentra entre lo mejor del disco. De Mayor, mientras tanto, se encuentra sin lugar a dudas entre lo mejor del cancionero español, y donde además me gustaría destacar el excelente trabajo instrumental que se ha llevado a cabo.
Es obligatorio destacar títulos como El Viento a Favor, una balada de indudable belleza, la notable Sólo si me Perdonas, la oriental ¿Dudar?, Quizás, la agradable e inocente Bailando con el Enemigo, la reposada Robinson y la terrenal Contradictorio.
La única composición que realmente me sobra es la prescindible Demasiado Tarde, a la que no le encuentro interés alguno.
Pequeño supuso un punto de inflexión en la carrera en solitario de Bunbury, ya que precisamente se trata del trabajo que impulsa practicamente a todos los trabajos que vinieron después. Una fusión de estilos que casa perfectamente con el oído y que se hace agradable de escuchar a todas luces. Tenemos un gran artista en nuestro país, que debemos saber disfrutar y apreciar, ya que músicos así, no se encuentran todos los días.
Mi puntuación: 8'75
Tracklist:
- Algo en Común
- Infinito
- El Extranjero
- Sólo si me Perdonas
- El Viento a Favor
- Lejos de la Tristeza
- ¿Dudar?, Quizás
- Demasiado Tarde
- De Mayor
- Bailando con el Enemigo
- Robinson
- Contradictorio
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