Formación de la banda en The Good Son:
- Nick Cave (Voces, Piano, Hammond, Armónica)
- Mick Harvey (Bajo, Guitarras Acústicas, Percusión, Coros)
- Blixa Bargeld (Guitarras, Coros)
- Kid Congo Powers (Guitarras)
- Thomas Wydler (Batería, Percusión)
Hablar de Nick Cave es hacerlo de uno de los artistas más prolíficos de la música en los 80, 90 y hasta la actualidad. Poseedor de una discografía extensa y sin ningún lunar importante, siempre contando con una regularidad que asombra.
The Good Son supuso un punto de inflexión en la carrera del músico, ya que comenzaba a sumergirse en terrenos más melódicos, a la vez que compondría varias de sus obras más importantes. De hecho, este álbum vio la luz en el año 1990, y prácticamente hasta el día de hoy, no ha parado de crear obras maestras.
Acompañado de sus imseparables músicos, los The Bad Seeds, completaron esta obra compuesta por 9 canciones, algunas de ellas clásicos imperecederos de su carrera y de la música como concepto global.
El álbum se abre con Foi na Cruz, una canción con un estribillo cantado en portugués, y donde Cave se acompaña de otras voces como las de Clovis Trindade y Rubinho, y que está basado en un himno tradicional protestante del Brasil.
A ésta le sucede el corte que da título al álbum, The Good Son, con cambios de ritmo contínuos y un Cave desatado en las voces, junto a una percusión que roza el caos sonoro, pero en el buen sentido de la palabra.
Sorrow's Child es algo más convencional con una sección de cuerda preciosa y unos buenos aportes de piano. Lo que nos encontramos a continuación son dos platos fuertes, que se desmarcan del resto de composiciones por su grandeza. La primera es The Weeping Song donde las voces graves de Nick Cave y Blixa Bargeld son las protagonistas absolutas de la canción, con unas melodías vocales decadentes sin ignorar la belleza que aún así aportan. La segunda es The Ship Song una preciosa balada de coros sugerentes, bonitos pianos y la voz crooner de un magistral Nick Cave en la interpretación. Pone los pelos de punta.
The Hammer Song tiene un ritmo machacón, con algunos dejes de guitarra más propios de una película western mientras que Lament explora la faceta más melódica del artista.
The Witness Song es un corte acelerado, un rock & roll desenfadado, eso sí, al estilo Cave. Y para cerrar el álbum, Cave nos obsequia Lucy, y una interpretación espectacular, a la altura de la afamada The Ship Song.
The Good Son señaló el camino que Nick Cave seguiría en los años posteriores, donde las melodías brillarían todavía más que antaño, y donde las composiciones serían más cuidadas, con una sonoridad más elegante y una compenetración instrumental que te deja la boca abierta. Una de las obras maestras absolutas del artista, por no decir que es su mejor obra.
Mi puntuación: 10
Tracklist:
- Foi na Cruz
- The Good Son
- Sorrow's Child
- The Weeping Song
- The Ship Song
- The Hammer Song
- Lament
- The Witness Song
- Lucy
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